UNA RESIDENCIA CON HISTORIA
La vivienda de Balduino y Fabiola de Bélgica en Granada: 27.000 m2 que ya están abiertos al público
La casa, situada en Motril, se encuentra a una distancia de 50 metros de la orilla del mar y tiene vistas a Sierra Nevada
El 31 de julio de 1993, el rey Balduino moría de un ataque al corazón en la terraza de ‘Villa Astrida’, la finca vacacional que disfrutó junto a su mujer, Fabiola de Mora y Aragón, desde los años 60 hasta su fallecimiento.
El gran inmueble, ubicado en Playa Granada, en el municipio de Motril, fue habitado por primera vez en 1967 y está formado por diez habitaciones y numerosas zonas comunes con un carácter sumamente austero.
Tal y como hemos podido saber a través de EFE, entre las características del espacio destaca un pasillo que se abre hacia un amplio salón y una biblioteca. También posee un patio central especialmente luminoso cuya protagonista es una fuente rodeada de columnas nazaríes. Además, la casa incluye un pequeño museo dedicado a los objetos personales de Balduino y Fabiola, que fue inaugurado por la reina Sofía durante el verano pasado.
Ahora, gracias a la Fundación INEIS, la vivienda ya se puede visitar. Según la página web ‘Memorial rey Balduino’, el acercamiento a la ciudadanía de esta vivienda se hace con la intención de “dar a conocer la figura de Balduino, rey de los belgas”, y añade que la organización pretende “transmitir al público los valores y la filosofía de este monarca, entregado en cuerpo y alma a su país, Bélgica, y compartir con todos los que se acerquen a este lugar su trayectoria humana y espiritual”.
En lo referente a esta parte mística del monarca, la fundación también quiere destinar la vivienda a la organización de “jornadas de retiro espiritual”, tal y como indica la agencia de prensa. Y es que, en uno de los laterales hay una capilla en la que el último jueves de cada mes se celebra una misa; en honor a misa diaria que celebraba el matrimonio. Asimismo, pretende la realización de diversas charlas para colegios, cofradías y el uso de la finca para reuniones empresariales.
La gerente del 'Memorial Rey Balduino', Isabel Ferrer, explicaba a EFE, que se trata de “un espacio con mucha historia y que guarda muchos secretos” porque durante la época en la que los reyes se alojaron allí, estos eran visitados por numerosas personalidades y en los encuentros se trataban “muchos temas delicados de Estado”.