La reina Margarita de Dinamarca, la más 'rebelde'

La reina Margarita II de Dinamarca cumple setenta años mañana. Con motivo de ese aniversario tan señalado, la soberana danesa ha abierto su corazón a los medios de comunicación. Las revistas del corazón en España esta semana presentan a una reina moderna que nada tiene que ver con las viejas tradiciones. Margarita de Dinamarca no tiene problema en reconocer que no tiene ninguna intención de abdicar.

Aunque sea políticamente incorrecto en estos tiempos que corren la reina de Dinamarca tampoco piensa dejar de fumar, según recoge la revista Diez Minutos. Esta mujer con una fuerte personalidad, decidida y familiar sigue con un programa de actos de lo más complejo, pero aseguraba también en una reciente rueda de prensa dada en Copenhague que no tiene pensado reducirla.

Mientras Diez Minutos reproduce la rueda de prensa, Hola se cuela en el jardín de Marselisborg, el reino privado de la madre del príncipe Federico. Allí cultiva sus propias rosas, quizá uno de sus tesoros más preciados, casi tanto como las joyas de la corona.

Asegura la soberana que su abuela le dijo una vez que ella heredaría, algo que la hizo muy feliz. “Las hicieron para la primera Reina Bernadotte, Desirée” comenta la reina en Hola y añade, “Me llena de orgullo que Mary las lleve”. Precisamente Mary Donalson, la esposa del príncipe Federico, es quien está destinada a ocupar su lugar en el trono danés, como consorte que es del futuro Rey.

La relación entre suegra y nuera parece excelente. Ni los miembros de la familia Real ni el pueblo recuerdan ya cómo Donalson, australiana de nacimiento, tuvo que ir poco a poco adaptándose a la vida de la corte danesa y a los actos institucionales. Mientras la princesa Mary se prepara para reinar, Margarita se aferra a ese puesto que le ha tocado vivir por cuna y que no está dispuesta a abandonar todavía.