La reina it girl: Paola de Bélgica y un estilo que sigue presente a los 86 años

Este miércoles, los que fueran reyes de Bélgica presidían el Queen Paola Prize, aunque delegando ya las tareas más institucionales en su nuera, la princesa Claire, a la que adoran y con la que tienen una relación bastante mejor que la que tienen con su propio hijo. Fue una jornada divertida, donde se vio de nuevo al matrimonio real, en una de las escasas apariciones públicas que protagonizan a su edad.

Pero también la cita estuvo marcada por un detalle: el indiscutible estilo de la reina Paola, que sigue presente a sus 86 años. Con unos pantalones en color burgundy, a juego con su capa con estampado pata de gallo, poco más le hizo falta para demostrar por qué fue considerada durante su reinado todo un icono de moda.

No en vano, la madre del actual rey de los belgas nunca falta en las listas que se hacen de las royals más bellas y elegantes. Los más expertos aseguran que su reinado fue una continua master class de moda y qur rivalizó en estilo con la difunta Grace Kelly. Pero por la trágica muerte de la princesa de Mónaco en 1982, nunca sabremos si ahora rivalizarían de la misma forma.

Lo que sí que sabemos es que Paola de Bélgica mantiene a sus 86 años el estilo del que tanto se ha hablado durante las últimas décadas. En su última aparición presumió de su blanca melena y, viendo su rostro, pocos dirían que tiene esa edad. Unos sencillos pendientes de perlas y un collar de las mismas piedras sirvieron para coronar un look que, una vez más, demuestra que siempre va 'comme il faut', que dirían los franceses.

En los 60, cuando acaparaba todos los focos, el sentirse alejada del trono belga le permitió vestir de una manera que, dentro del Gotha, podría incorporarse incluso rebelde. Las minifaldas fueron un imprescindible, así como los estampados originales y los colores vivos.

Pero si hay imágenes de Paola Ruffo di Calabria que impactan e incluso atrapan son aquellas en las que luce esos tocados y originales turbantes, diademas y sombreros a los que era tan aficionada. Un complemento que acentuaba su belleza natural y que fue tan admirada en aquellas primeras décadas en la corte belga.

Quien tuvo retuvo y la Paola de hoy tiene mucho de la del pasado, lógicamente, adaptando las prendas a la edad y, sobre todo, la comodidad que necesita en estas apariciones públicas, escasas desde que su marido dejara el trono en manos de su primogénito, hace ya 11 años.

Desde entonces, vive la tranquilidad de no tener las responsabilidades institucionales que asumió, por matrimonio, cuando su cuñado Balduino murió sin hijos. Y, al menos en el plano más oficial, sin preocupaciones. Tampoco la de estar elegante y adecuada para cada ocasión le suponía un dolor de cabeza, ni cuando era princesa, ni cuando era reina. Y mucho menos ahora. Aunque, a sus 86 años, lo siga consiguiendo.