En imágenes | Cómo Sophie, duquesa de Edimburgo, ha puesto color a una pomposa jornada con Carlos III y Camila

Hace unos meses, el monarca británico anunció que tanto su esposa como su hermano pequeño, el príncipe Andrés, entrarían a formar parte de la Orden del Cardo, la más prestigiosa de Escocia. Y la entrada oficial a la misma ha tenido lugar este mismo miércoles en la catedral de Saint Giles, donde ha tenido lugar una pomposa jornada con Carlos y Camila como protagonistas, pero con Sophie, la duquesa de Edimburgo, poniendo la nota de color.

Tampoco era muy difícil ya que tanto el monarca como la reina y el príncipe Eduardo lucían los ropajes correspondientes a la Orden del Cardo, con largas túnicas de terciopelo verde y un inconfundible sombrero con plumas blancas.

Así que el look de Sophie de Edimburgo, que acompañó a su marido en este día tan especial, destacó por encima del resto con su vestido rosa con escote drapeado y cuerpo ceñido. Y solo hacía falta que elevara levemente la cabeza para descubrir el mejor detalle de su look, porque el forro de su pamela hacía que su atuendo fuera aún más especial.

Hablamos de un sombrero de ala ancha diseñado por Emilia Wickstead y que presentaba por debajo un estampado floral, un detalle muy característico que elevaba un look sobrio y con el que, a priori, no quería tener gran protagonismo. Es el mismo que lució en la cita hípica de Ascot en 2019, combinándolo entonces con un vestido del mismo estampado.

Lo cierto es que, como decíamos, no era difícil que Sophie de Edimburgo se llevara este miércoles todos los flashes en Escocia. Hay que tener en cuenta que es un acto muy simbólico en el país, una de esas fechas señaladas en rojo en el calendario royal, por lo que la expectación estaba servida. Además, el hecho de que el monarca invistiera oficialmente a la reina Camila y el príncipe Eduardo le daba aún más importancia.

Pero claro, una cita tan esperada ha contado con una destacada ausencia. Porque Kate Middleton no ha podido unirse a esta jornada, a pesar de que, cuando anunció su regreso a la agenda oficial el pasado junio, esta fue una de las fechas que se barajaron para sus citas públicas de verano, precisamente por su simbología y su importancia.

Así que, ante la falta de la princesa de Gales, la prensa británica ha vuelto a rendirse ante el estilo de su tía política, algo que lleva pasando desde hace tiempo, no solo desde que Kate desapareciera por completo de la agenda pública por sus problemas de salud.

Sí estuvo presente el príncipe Guillermo, también uniformado con la túnica de terciopelo verde y el sombrero de plumas que le corresponde desde 2012, cuando el duque de Rothesay -el título que le corresponde cuando se encuentra en suelo escocés- recibiera el honor de manos de su abuela, la reina Isabel II.