Cuánto tiempo hay que remojar de verdad los garbanzos para que no pierdan sus propiedades

"Las grandes esencias se guardan en frasco pequeño", una frase que nos viene como anillo al dedo para describir a los garbanzos. Una pequeña legumbre que esconde en su interior muchas propiedades y que debemos cuidar durante todo el proceso de cocinado para que no las pierda.

Ricos en proteínas vegetales, son además una gran fuente de fibra, vitaminas y minerales. Son la opción perfecta en dietas veganas y/o vegetarianas, ya que se trata de un alimento muy completo y nutritivo. Entre sus minerales están el hierro, el magnesio, el fósforo y el zinc, todos ellos esenciales para mantener nuestros huesos fuertes, producir más glóbulos rojos y proteger el sistema inmunológico, entre otras bondades.

Cuando vamos a cocinar los garbanzos, entendiendo que no estamos hablando de los que ya vienen cocidos, lo primero que vamos a hacer es ponerlos a remojo, un paso esencial para conseguir que se ablanden antes del cocinado.

El tiempo recomendado es de 12 a 14 horas y eso en un mundo en el que vamos corriendo a todas partes nos puede parecer una eternidad. Por eso hemos buscado algunos trucos que nos permitan reducir este tiempo sin renunciar a sus propiedades.

El método de siempre

Como ya hemos comentado, lo que se ha hecho toda la vida es poner a remojo los garbanzos entre 12 y 14 horas. De esta manera conseguimos que absorban el agua, se expandan y con ello se ablanden, así es mucho más fácil cocinarlos.

Por regla general, lo que se hacía era dejarlos el día anterior para que estuvieran toda la noche a remojo. Así al día siguiente ya podíamos utilizarlos. Este era el truco de la época, pero los tiempos actuales nos requieren rapidez y efectividad.

El microondas, tu gran aliado

Está claro que se ha convertido en un electrodoméstico imprescindible en la mayoría de los hogares españoles. Gracias al microondas podemos conseguir reducir los tiempos de cocinado a través de pequeños trucos.

Con los garbanzos no iba a ser menos. Con el método que te vamos a proponer solo vas a necesitar 15 o 20 minutos para tener listos tus garbanzos. ¡Vamos al lío! Lo primero es colocarlos en un recipiente que sirva para el microondas y cubrirlos con bastante agua, que queden cubiertos. Ten en cuenta que los garbanzos van a expandirse así que es importante que dejes algo de espacio.

Una vez que ya los tienes preparados, mete el recipiente en el microondas y ponlo a máxima potencia para calentar los garbanzos durante aproximadamente 15 minutos. Con el calor que van a recibir el proceso se acelera. Conseguimos que absorban el agua en menos tiempo y se ablanden antes.

Tras calentarlos llega el momento de dejarlos reposar durante otros 10 minutos. Te recomendamos que no te saltes este paso si quieres que los garbanzos estén preparados para cocinarlos después.

Después de dejarlos reposar, pásalos por agua fría. Si quieres que se ablanden más repite el proceso añadiendo un poco de bicarbonato de sodio, que ayuda a que esta legumbre se ablande aún más rápido.

¡Y ya está! Los garbanzos están listos para que los cocines a tu gusto. Puedes hervirlos o meterlos en la olla a presión, sea cual sea la receta que hayas elegido ya no tienes que esperar una eternidad para utilizarlos.