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Si pierdes los nervios en estas situaciones, los culpables no son tus hijos sino tus padres
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Si pierdes los nervios en estas situaciones, los culpables no son tus hijos sino tus padres

Hay situaciones de la vida cotidiana que pueden ser más difíciles de lo normal por la experiencia que se tiene con tus propios padres

Foto: Un padre dando un paseo con su hijo (pexels)
Un padre dando un paseo con su hijo (pexels)

La paternidad y la maternidad son roles complejos, cargados de responsabilidad y emociones intensas. Sin embargo, a menudo, las respuestas que tenemos como padres no son completamente conscientes. Según el psicólogo Álvaro Bilbao, muchas de nuestras reacciones automáticas, especialmente las negativas, tienen raíces profundas en nuestras propias experiencias de infancia. Comprender estos patrones puede ser la clave para mejorar nuestra relación con nuestros hijos y evitar repetir los errores del pasado. Bilbao sugiere que muchas de las situaciones que nos hacen perder los nervios como padres son respuestas automáticas grabadas en nuestra infancia. Estas reacciones no son meramente fruto del presente, sino ecos del pasado que se manifiestan en el aquí y ahora.

Si pierdes los nervios cuando tus hijos se pelean es posible que no te protegieran en la infancia cuando uno de tus hermanos te pegaba o que alternaban la falta de límites con gritos y castigos de una forma que era desproporcionada y estresante para ti”, explica el experto. Pero hay muchos ejemplos más de situaciones cotidianas en las que se acaban repitiendo los errores que cometieron los padres.

placeholder Una madre jugando con sus hijos (pexels)
Una madre jugando con sus hijos (pexels)

Otra situación que explica el psicólogo es que si pierdes los nervios cuando llegáis tarde a algún sitio “es posible que tus padres te enseñaran que llegar tarde es intolerable pero sigues llegando tarde porque no te ayudaron a organizarte con tiempo suficiente y ser disciplinado”.

Otra de las situaciones más comunes es cuando se pierden los nervios porque los niños no obedecen las órdenes que das, en este caso, el psicólogo explica que “es posible que en tu infancia tus padres reaccionaran de forma desproporcionada a las faltas de colaboración porque las consideraban un signo de burla y una falta de respeto intolerable”.

placeholder Un padre con su hija de excursión (pexels)
Un padre con su hija de excursión (pexels)

Por ejemplo, en una situación en la que hay desorden en casa es posible que te siente mal, pero si reaccionas desproporcionadamente es probable que “en tu infancia te enseñaran que el desorden era algo intolerable o que tengas demasiado estrés o cosas en las que pensar y el desorden termine por desbordar tus emociones”.

Otro caso habitual es cuando los niños te faltan al respeto y te cuesta controlar la ira. Es posible que en tu infancia tus padres reaccionaran de forma desproporcionada ante tus enfados en lugar de enseñarte que son “reacciones naturales que se deben educar de forma firme y calmada”, explica Bilbao. Darte cuenta de estas pequeñas cosas te puede ayudar a responder de forma más calmada. Y reflexionar acerca de los errores que cometieron tus padres te puede ayudar a no cometer los mismos errores con tus hijos.

La paternidad y la maternidad son roles complejos, cargados de responsabilidad y emociones intensas. Sin embargo, a menudo, las respuestas que tenemos como padres no son completamente conscientes. Según el psicólogo Álvaro Bilbao, muchas de nuestras reacciones automáticas, especialmente las negativas, tienen raíces profundas en nuestras propias experiencias de infancia. Comprender estos patrones puede ser la clave para mejorar nuestra relación con nuestros hijos y evitar repetir los errores del pasado. Bilbao sugiere que muchas de las situaciones que nos hacen perder los nervios como padres son respuestas automáticas grabadas en nuestra infancia. Estas reacciones no son meramente fruto del presente, sino ecos del pasado que se manifiestan en el aquí y ahora.

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